Así está escrito en un fragmento del Evangelio de San Mateo que menciona a los Magos (Mt 2, 1-12).
1 Y como fue nacido Jesús en Bethlehem de Judea en días del rey Herodes, he aquí unos magos vinieron del oriente a Jerusalem, 2 Diciendo: ¿Dónde está el Rey de los Judíos, que ha nacido? porque su estrella hemos visto en el oriente, y venimos a adorarle.
Desde entonces la tradición de los reyes magos de oriente ha estado presente en el día 6 de enero.
Regalaron oro, incienso y mirra sin que fuera casual, su apelativo poco tenía que ver con la magia y el roscón con el que se celebra el día tiene orígenes paganos.
Cuenta la Biblia que los tres Reyes Magos visitaron al Niño Jesús en el pesebre para presentarle sus respetos mediante tres curiosos regalos: oro, incienso y mirra; si bien en las Sagradas Escrituras no se profundiza demasiado en estos tres monarcas. Con el tiempo, el Día de Reyes se ha convertido en una festividad arraigada en España, México, Puerto Rico, Paraguay Uruguay y Colombia, celebrando un día festivo, pero no en Argentina, Bolivia, Chile, Colombia, Costa Rica, Ecuador, Guatemala, Panamá, Paraguay, Perú o Venezuela. También lo es en partes de Alemania, Austria, Croacia, Eslovaquia, Finlandia, Italia, Liechtenstein, Suecia y Suiza.
En esta festividad se colma a los más pequeños de regalos y se degusta el clásico roscón.
INCIENSO, ORO y MIRRA
Los tres presentes que Melchor, Gaspar y Baltasar llevaron a Belén están repletos de simbolismo. El oro era un regalo de reyes para reyes. Reconocían así la naturaleza regia del Niño Jesús, al que reconocían como el Rey de los Judíos.
El incienso se empleaba entonces por las religiones paganas para adorar a sus deidades, costumbre adquirida y conservada hasta la actualidad por algunas ramas del cristianismo, por lo tanto, el incienso significaba que también reconocían su dimensión divina.
La mirra hace referencia a su condición humana y redentora. Mezclada con vino se utilizaba como analgésico, con lo que se hace referencia a que Jesucristo había venido al mundo para salvar a la humanidad. Además, se presenta en forma de lágrimas escarlata y se empleaba para embalsamar a los muertos por lo que muchos expertos aseguran que este presente hace referencia a la sangre que posteriormente Jesús derramaría en la Crucifixión.
La Biblia no profundiza demasiado en estos tres monarcas-Â ni siquiera menciona sus nombres– a pesar de que en la actualidad se piensa en ellos con unas características claras y marcadas.
Melchor se identifica con un anciano de barbas y pelo cano, Gaspar como un joven moreno- aunque muchas veces se le muestra castaño o incluso pelirrojo- y Baltasar se representa como un hombre de raza negra.
Quedan entonces representadas tres razas conocidas en la antigí¼edad, los tres continentes de la época -ífrica, Europa y Asia occidental-así como las tres edades del hombre.
En el Evangelio de San Mateo (Mt 2, 1-12) se emplea la palabra Magos para referirse a estos visitantes del pesebre. Se asume que eran “sabios” o astrónomos,porque venían siguiendo una estrella que presagiaba la llegada del nuevo rey. En aquella época, ciencia y magia se confundían, explicando así la aparición de este apelativo.
6 DE ENERO
Resulta extraño que si el nacimiento del Niño Jesús se fecha el 25 de diciembre, los Reyes Magos hubieran llegado al pesebre- y encontrado allí al recién nacido y a su familia-, el seis de enero.
En origen, el 6 de enero se atribuye a la Epifanía cristiana. Es decir, cuando se considera que Jesús toma una presencia humana en la tierra, es decir se “da a conocer”. El término Epifanía puede ser entendido para traducir el concepto de “gloria de Dios” que indica las huellas de su paso o, más simplemente, su presencia. A Jesucristo se le atribuyen tres revelaciones en las que muestra su naturaleza:Â la Epifanía ante los Reyes Magos, ante San Juan Bautista en el Río Jordán y en las Bodas de Caná.
En referencia a la primera, muchas obras pictóricas tituladas como Epifanía representan el nacimiento de Cristo. La Epifanía y la llegada de los Reyes Magos se celebraban el mismo día y han llegado a confundirse.