EL MAÑANA.-El gobierno de Estados Unidos recomendó a sus ciudadanos limitar sus viajes al estado de Guerrero, en el sur de México, debido a las protestas derivadas de la desaparición de 43 normalistas hace casi dos meses.
En una alerta, la embajada estadounidense en territorio mexicano informó que por el momento su personal tiene prohibido realizar viajes “no esenciales†al puerto de Acapulco, uno de los principales centros turísticos del país, así como los recorridos por carretera en toda la entidad.
“El personal de la embajada ha recibido instrucciones de aplazar los viajes no esenciales a Acapulco por vuelo o por carretera. (…) Además, viajes por carretera en todas las otras partes del estado permanecen prohibidosâ€, señala el mensaje.
La sede diplomática detalla que siguen permitidos los viajes por aire a la zona de Ixtapa Zihuatanejo y que todas estas recomendaciones también están dirigidas a los estadounidenses en general, así como la sugerencia de evitar las actividades políticas porque la Constitución mexicana prohíbe que extranjeros participen en ellas.
“Los ciudadanos americanos deben evitar cualquier manifestación política y otras actividades que pudieran considerarse políticas por las autoridades mexicanas. Incluso las manifestaciones pacíficas pueden tornarse confrontacionales y degenerar en violenciaâ€, señala.
Este mensaje se produce un día después de que miles de personas se manifestaran en el Distrito Federal en protesta por la desaparición de los normalistas.
La mayor parte de la manifestación fue pacífica, aunque al final se registraron enfrentamientos entre algunos inconformes y policías.
Las protestas que se han llevado a cabo en Guerrero también han incluido hechos de violencia, como la quema de edificios públicos y de vehículos.
Este viernes, por ejemplo, unos 200 profesores de la entidad bloquearon los accesos a la sede estatal de la Confederación Patronal de la República Mexicana (Coparmex), así como a los edificios de las secretarías de Educación y de Finanzas en la ciudad de Chilpancingo, según un reporte de la agencia EFE.
Los docentes se han sumado a otros normalistas y a ciudadanos para exigir la localización de los jóvenes, que presuntamente desaparecieron a manos de policías de Iguala que los entregaron a un grupo criminal.
