Al término de la reunión del Puesto de Mando Unificado (PMU), el Presidente Iván Duque anunció la declaratoria de la emergencia sanitaria, que permite poner en marcha nuevas medidas orientadas a la contención del coronavirus en el país.

El Gobierno de Colombia ha declarado este martes el estado de emergencia para contener la propagación del coronavirus, y anunció como primera acción el aislamiento preventivo obligatorio de los mayores de 70 años. “Sabemos que quienes corren el mayor riesgo son nuestros abuelos”, dijo el presidente, Iván Duque, en una alocución televisada para explicar la medida. Para protegerlos, argumentó, a partir del viernes 20 de marzo, y hasta el próximo 31 de mayo, “deberán permanecer en sus hogares salvo para abastecerse de bienes de consumo y de primera necesidad, utilizar servicios de salud, adquirir medicamentos y acceder a servicios financieros”.

“Este es el esfuerzo prioritario de protección en este momento de la pandemia”, enfatizó el mandatario. Colombia da así un paso más en la escalada de medidas de aislamiento y distanciamiento social para contener el contagio de la covid-19, que Duque calificó como “el mayor desafío de la humanidad en tiempos recientes”. Como parte de la fase de contención, el Gobierno ya había cerrado todas sus fronteras –terrestres, fluviales y marítimas–, restringido el ingreso de extranjeros y limitado las reuniones públicas y privadas a un máximo de 50 personas. Los viajeros colombianos y residentes que ingresan al país deben someterse durante 14 días a un aislamiento preventivo obligatorio.

“Ante las condiciones excepcionales que enfrenta el país, como presidente de la República, y junto a todos los ministros del Gabinete, hemos tomado la decisión de decretar el estado de emergencia”, de conformidad con la constitución política, anunció Duque, quien había decretado previamente la emergencia sanitaria. Anticipó un conjunto de medidas económicas que terminó de delinear a primera hora de este miércoles: mayores recursos para el sistema de salud, más giros para los beneficiarios de los programas gubernamentales de transferencia de recursos –Familias en Acción, Jóvenes en Acción, Adulto Mayor– y alivios financieros con el objetivo de garantizar el pago de nóminas y créditos, entre otras.

Las autoridades redoblan así un paquete que incluye también la suspensión, desde esta semana, de las clases presenciales en colegios y universidades para reducir la circulación del virus en niños y proteger así a los grupos más vulnerables. “Estas medidas son muy complejas y difíciles, representan un impacto muy grande en nuestras familias al tener el niño en casa, pero evidentemente son medidas que buscan proteger a nuestra población colombiana”, había explicado el ministro de Salud, Fernando Ruiz Gómez, sobre esas decisiones. “Todos debemos entender que la epidemia del coronavirus es compleja, que tiene una tasa de afectación muy alta en la comunidad y que por tanto muchas de las intervenciones y actividades sociales se van a ver afectadas”.

Los gobernadores de al menos ocho de los 32 departamentos de Colombia, y algunas otras ciudades capitales, han decretado el toque de queda como parte de las medidas extraordinarias para prevenir la propagación. La alcaldesa de Bogotá, Claudia López, también anunció este martes que entre el viernes y el lunes festivo la capital de Colombia hará un simulacro de cuarentena general, con restricción de vehículos y sin que los ciudadanos salgan de sus hogares. Desde que Colombia detectó su primer caso, el viernes 6 de marzo, la cifra ha escalado hasta 93 análisis positivos, según del ministerio de Salud. “En nuestro país seguimos teniendo la cadena de contagio identificada”, destacó el presidente Duque en su alocución.

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