La señora marcó al 911 para informar que ‘un menor de raza negra actuaba sospechosamente’; era el primer día del primer trabajo del pequeño.

Un niño de 11 años de edad, repartidor de periódicos en Ohio fue detenido e interrogado por la policía la semana pasada en lo que parece ser otro ejemplo más de cómo la gente blanca se asusta y llama a la policía con tan solo ver a gente negra aunque no esté haciendo absolutamente nada malo, reporta ABC 6.

El viernes pasado por la tarde, el preadolescente Uriah Sharp estaba en su primer día como repartidor de periódicos en el vecindario Columbus de Upper Arlington con su madre, Brandie, y su hermano de 17 años. En un momento dado, Uriah se confundió un poco con la nueva ruta y accidentalmente entregó unos periódicos en las casas equivocadas.

Es un error bastante inocuo, comprensible para un niño de 11 años que está en el primer día de su primer trabajo, así que ni él ni su madre le dieron mucha importancia. Sharp simplemente corrió para recoger los periódicos que había entregado en las casas incorrectas y luego llevarlos a las correctas. Desafortunadamente, una mujer del vecindario aparentemente pensó que Sharp estaba actuando “sospechoso”. Así que, en lugar de hacer lo normal y simplemente, ya sabes, salir a charlar con Uriah y su madre para ver qué pasaba, la señora marcó el 911.

“Al principio parecía que estaban entregando periódicos o algo”, dijo la mujer al despachador de la policía durante la llamada, “pero noté que estaban caminando hacia las casas sin nada en la mano y luego volvieron también sin nada. O sea, no estoy diciendo que algo está sucediendo, pero me pareció sospechoso”.

Un policía se presentó e interrogó a la familia acerca de lo que estaban haciendo. No pasó mucho tiempo para que el oficial se diera cuenta de que el niño pequeño y su madre sólo estaban entregando periódicos, pero tanto Brandie como Uriah se sintieron consternados por todo el incidente.

 

“El oficial de policía se detiene y nos hace preguntas como si estuviéramos invadiendo el área”, escribió Brandie Sharp después en una publicación de Facebook. “Completamente disgustada y alarmada ante el hecho de que este tipo de comportamientos siga existiendo… Me disculpo Upper Arlington por llevar a mi hijo afroamericano [de 11 años] a su vecindario para entregar el periódico y así ganar algunos dólares… NO QUERÍAMOS MOLESTARLOS”.

Uriah le dijo a ABC 6 que planea seguir entregando periódicos, pero que se siente un poco “incómodo” después del incidente con la policía.

“Es triste que ni siquiera pueda enseñarle a mi hijo el valor del trabajo sin que alguien murmure y nos mire de reojo porque tal vez NO nos vemos como alguien del vecindario'”, escribió Brandie.

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