5d39a0e9ed411Más de seis horas hizo esperar el gobernador Ricardo Rosselló Nevares a la prensa local e internacional, a los miles que se congregaron en el Viejo San Juan y a millones de puertorriqueños para dar a conocer su decisión sobre si renunciaba o no.

Pero una vez dijo las palabras “con desprendimiento hoy les anuncio que estaré renunciando al puesto de gobernador, efectivo el viernes 2 de agosto de 2019 a las 5:00 de la tarde”, más de 12 días de aguantar sol, gases lacrimógenos, balas de goma, aguaceros y el dolor de los pies por marchar se convirtieron en un estallido de júbilo que retumbó por todo Puerto Rico y el mundo.

En la última jornada, esas seis horas de postergación trajeron un Gobernador nervioso y desencajado en su mensaje de renuncia.

“Ricky (Rosselló) te botamos”, gritaban al unísono frente a la Mansión Ejecutiva tras conocer la decisión, mientras el cantante Residente se mostraba agradecido por las muestras de cariño de los manifestantes.

En varias partes de la ciudad, los habitantes salieron a las ventanas y llevaron a cabo un cacerolazo, mientras que en las calles enarbolan la bandera puertorriqueña y hacen sonar las bocinas de sus automóviles.

Como si fuera Año Nuevo, las calles de las áreas turísticas de San Juan se llenaron de vehículos, algunos en caravana, desde los que se escuchaba música a todo volumen para celebrar la ocasión histórica de haber logrado la primera dimisión de un gobernador en la historia de Puerto Rico. “Preciosa”, “Afilando Cuchillos” y, claro, “Te Boté” eran las preferidas para proyectar los sentimientos de triunfo tras 12 días de resistencia y protesta pacífica.

Más temprano, Residente, Nicky Jam y P J Sin Suela se habían unido a la manifestación de “perreo combativo” convocada para, de todos los escenarios, frente a la Catedral de San Juan. No solo movimientos pélvicos tórridos, sino pechos al aire, marcaron esa protesta, una de las muchas llenas de creatividad y de diversidad en la jornada en la que el pueblo de Puerto Rico se puso de pie y probó el dulce sabor de la libertad.

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