Imagen6Múzquiz, Coah.- Definitivamente el trabajo de cobrador los últimos años se ha vuelto una labor por demás difí­cil, sobre todo en una población como Melchor Múzquiz, donde la mayorí­a de las personas  se conocen y a eso hay que agregarle la presión a la que son sometidos los empleados de algunas mueblerí­as de cadenas nacionales, que además de muebles se dedican a prestar dinero con mí­nimos requisitos, y lo logran con publicidad como esta : “Te prestamos hasta 10 mil pesos en menos de 24 horas”.

Y así­ sucede efectivamente,  lo que no se informa es la gran cantidad de intereses que deberá de pagar quien adquiera estos préstamos, y así­ poco a poco la se van juntando los pagos atrasados, es ahí­ cuando interviene  un departamento especial que esta cadena de mueblerí­as tiene para recuperar la cartera vencida de sus clientes, quienes por medio de citatorios “invitan” a los morosos a ponerse al corriente .

Claro que para ese entonces los diez mil pesos ya pueden ser lo doble o mucho más, dependiendo del tiempo que haya transcurrido, esta labor la realiza desde hace unos meses el señor Daniel Ferrer Gallegos, quien ante la falta de empleos bien pagados en la región se enroló como asesor de cobranza, y fue ahí­ donde empezaron los problemas, pues ha recibido amenazas de personas que les molesta mucho la visita “del viejo de la moto” y en vez de pagar pues descargan todo su coraje contra los cobradores.

El dí­a de ayer se presentó en la agencia del ministerio público con el rostro desfigurado a causa de una severa golpiza que le propino su primo hermano de nombre René Alejandro Valdez Ferrer, quien estaba por demás ofendido por que a su esposa le habí­an llevado un citatorio de esta mueblerí­a, requiriéndole un pago atrasado, lo que le molestó mucho y supuso que su primo algo habí­a tenido que ver.

Es por eso que el pasado sábado lo esperó hasta que salió de una reunión, en completo estado de ebriedad y de manera por demás ventajosa lo golpeó y pateó en la calle hasta que se cansó, ahora el cobrador golpeado espera que las autoridades hagan pagar a su primo por los gastos médicos además de los dí­as de trabajo perdidos.

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